lunes, 5 de julio de 2010

Visita a Barcelona del Obispo Frank de Nully

El pasado lunes 28 de junio, el obispo Frank de Nully Brown , de la Iglesia Evangélica Metodista de Argentina, juntamente con su esposa Myriam Alicia Martos , visitaron Barcelona y fueron recibidos por el Sr. Joel Cortés, y el pastor Carlos Capó , presidente y secretario 1º respectivamente de la Comisión Permanente de la Iglesia Evangélica Española. El obispo de Nully , manifestó su interés en poder estrechar lazos de colaboración entre ambas iglesias que puedan ser en beneficio de su misión. En el transcurso de la entrevista fue posible intercambiar información relativa a las instituciones, obras diacónicas, proyectos, trabajo de los departamentos, la realidad social de cada una, etc.

Este primer contacto entre ambas instituciones eclesiales ha permitido observar puntos en común y perspectivas de colaboración que podrían concretarse en próximos encuentros. La IEMA, al igual que la IEE se encuentra en un proceso de reflexión y para el desarrollo de una pastoral inclusiva con la persona homosexual. La voluntad manifestada por el obispo Nully en este ámbito es la de poder hacer un trabajo de concienciación y de pedagogía en las comunidades, junto con actividades que favorezcan el conocimiento mutuo entre personas. “Cuando la persona homosexual es un hermano o una hermana las actitudes cambian”. Refiriéndose, también a otras iglesias que han llevado a cabo un proceso que ha culminado con una decisión vinculante para todas las comunidades, el obispo Nully manifestó estar convencido que todo proceso en este ámbito debe hacerse desde la realidad de las comunidades locales y su labor pastoral.

Así mismo el obispo de Nully hizo entrega de una carta que el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos , con sede en Buenos Aires, ha dirigido al juez Baltasar Garzón en “Apoyo a la búsqueda de verdad y justicia por los delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura franquista contra la República y el pueblo de España”. El ministerio episcopal en la IEMA no tiene carácter jerárquico, y no es vitalicio. El obispo es elegido para un periodo de 4 años, con la posibilidad de prolongarlo hasta 8 años, después de los cuales el ministro recupera su condición de pastor pasando a ejercer su ministerio en una comunidad local. La función episcopal es ejercida a pleno tiempo desarrollando una labor de proximidad hacia las comunidades locales, con visitas regulares a las mismas.
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Fuente: Noti IEMA Julio 1ro 2010