Evangelio de Lucas, 22.14 a 23.56. Se ofrecen las alternativas de distintas lecturas, desde las presentaciones de Jesús ante Pilato y Herodes, hasta su muerte y sepultura. También se puede optar por el relato de la entrada a Jerusalén en 19.28-44.
Isaías 50-4-9a. El “Siervo del Señor” expresa, en las palabras del profeta, su disposición a consolar y animar a los cansados y enfrentar el sufrimiento, aunque afirma también su integridad y su confianza en la justicia y en la ayuda de Dios.
Filipenses 2.5-11. Por su estructura en verso, el apóstol parece que inserta aquí un antiguo himno cristiano que canta la humillación de Cristo Jesús, desde el ser igual a Dios a morir en la cruz, hasta su exaltación y reconocimiento como Señor.
Salmo 31.9-16. El salmista ora pidiendo a Dios compasión, sintiéndose en el lugar más bajo de la experiencia humana, pero aún allí confiando en el amor de Dios: ¡“mi vida está en tus manos”, “tú eres mi Dios”!
