jueves, 21 de enero de 2010

Carta al Presidente de la Iglesia Metodista en Haití

Estimado hermano
Presidente de la Iglesia Metodista en Haití
Reverendo Gesner Paul
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Neuquén, 21 de enero 2010

Le escribimos en nombre de la Iglesia Evangélica Metodista Argentina frente a los hechos ocurridos en vuestra tierra cuyas imágenes nos siguen conmoviendo frente a tanto dolor y sufrimiento.

Estamos impactados por la realidad del terremoto y la situación de extrema pobreza que existía antes de este acontecimiento, pero que se pone a luz para toda la comunidad latinoamericana a partir del sismo.

Estamos orando por el ministerio de la Iglesia Metodista en Haití donde tienen que proclamar la esperanza que tenemos en Jesús en una realidad de extrema desolación. Recordar la frase de Wesley “el mundo es mi Parroquia” nos invita a mirar hacia afuera de nuestros templos donde la gente nos necesita. Esto seguramente es un desafío muy grande en este tiempo para ustedes.

Desde la Argentina queremos decirle que vuestro dolor es también el nuestro. Nos encontramos dispuestos a acompañarlos con oración, acciones solidarias y en la búsqueda de la justicia de Dios para que su Reino se haga realidad en medio nuestro.

Nuestras acciones solidarias se canalizarán a través de CIEMAL como se ha acordado con las demás iglesias.

Quedamos a disposición de ustedes para toda comunicación que crean necesaria y para que el pueblo metodista de Haití no se sienta solo frente a la misión que tiene por delante con los más débiles y destruidos.

Nos despedimos recordando las palabras de Pablo a los Romanos cuando dice: “Pero en esto salimos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Estoy convencido de que nada podrá separarnos del amor de Dios: ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni los poderes y fuerzas espirituales, ni lo presente, ni lo futuro, ni lo más alto, ni lo más profundo, ni ninguna otra cosa creada por Dios. ¡Nada nos podrá separarnos del amor que Dios nos ha mostrado en Cristo Jesús nuestro Señor! (8: 37-39).-

Fraternalmente en Cristo,

Pastor Frank de Nully Brown
Obispo